El pasado día 10 de octubre se inauguró la exposición colectiva «Crits del Mur. Artistes urbans en la sala» en la Llotja de Sant Jordi de Alcoy, en Alicante organizada por la Cátedra de Arte Contemporáneo Antoni Miró, el Ayuntamiento de Alcoy y curada por María Guillem, historiadora del Arte y gestora cultural de importantes colecciones artísticas como la Colección DKV y la Colección Banco Santander.
La Llotja de Sant Jordi es una sala de muestras y exposiciones de Alcoy, situada bajo el subsuelo de la plaza de España, un gran espacio de hormigón y granito (simulando el esqueleto de un animal de grandes dimensiones). Creado entre 1992 y 1995 por el arquitecto e ingeniero valenciano Santiago Calatrava (1951), arquitecto, ingeniero civil y escultor español.
La muestra reúne una selección de artistas que marcan la escena más contemporánea del arte urbano, reinterpretando el tema del paisaje dentro de la abstracción y conformando un lenguaje plástico propio.
Los artistas participantes son:
Vincent C.V.D. Spek (Kaniz), Xavi Ceerre, Lluïsa Penella, Germán Bel (Fasim), Javier Pérez (Roice 183) y Stillo Noir (Tanya Heidrich).
«Los seis artistas exploran universos imaginarios mediante una gran variedad de estilos abstractos, figurativos y expresionistas que conservan el origen crítico, social y político que los caracteriza.
Partiendo del hecho que el street art es un fenómeno que se origina en el paisaje urbano, las obras que en este recorrido se presentan conectan con la idea de paisaje natural y paisaje urbano donde la pintura es la protagonista. Es así como en un mismo espacio dialogan diferentes puntos de vista del paisaje que reinterpretan por medio de un arte que bebe del graffiti y del arte urbano.
Será a través de las producciones donde el espectador podrá identificar la influencia de la ciudad y el sentimiento de libertad que les une. La fuerza y la energía viven en estas obras que hablan sobre la importancia del territorio, la naturaleza, la historia y la identidad tan necesarias para vivir como un grito de supervivencia que nace en el muro hasta situarse en la sala expositiva.»
Escribe María Guillem, comisaria de la exposición.
«El paso del arte urbano de la calle a los museos es una evolución natural y necesaria en el desarrollo de esta tendencia artística. Su polivalencia, que se mueve entre el exterior y el interior, convierte el arte urbano en una cosa singular.
Sin duda, nos encontramos ante un arte que en su evolución ha conseguido una cosa inusual: conectar el exterior o la calle con el interior o espacio expositivo.
El trabajo de un artista urbano en la calle puede experimentarse también en el taller, igual que la labor realizada en el estudio puede ser fuente de inspiración para sus creaciones en el exterior. Las posibilidades son infinitas y la de estos dos conceptos opuestos llenan de riqueza sus manifestaciones.
Igual que el arte urbano, en el pasado otras nuevas tendencias como la fotografía, el videoarte, la instalación o la performance se introdujeron en el mercado del arte, con presencia en galerías, ferias de arte y museos.
La exposición en la Llotja de Alcoy ‘Crits del mur. Artistas urbanos en la sala’ nos ofrece la posibilidad de explorar el recorrido del arte urbano, desde la calle al espacio expositivo. De la mano de las obras de los artistas Fasim, Roice 183, KANIZ, Lluïsa Penella, Xavi Ceerre y Stillo Noir, no tan solo podremos disfrutar de todos los detalles y la versatilidad que ofrece esta tendencia artística, sino también de como su arte se convierte en un grito que muestra libremente y sin miedo el que sienten. Una expresión artística que transmite con fuerza el impulso de reflexionar en libertad.»
Destaca Óscar García García, Comisario independiente y Cofundador de PAC en el texto para la exposición.
Paisaje natural
El artista Vincent C.V.D. Spek / Kaniz deja a un lado las paredes y pinta sobre el lienzo. Pinturas propias de un inmenso universo creativo con las cuales autoanaliza los más íntimos y profundos sentimientos personales que siente y experimenta. Un conjunto de cuadros con que abre a un recorrido evolutivo de su obra que empieza desde el 2011 y llega hasta la actualidad. En la obra de Kaniz, los paisajes surrealistas y la investigación de identidad individual y colectiva son algunos de los temas principales de trabajo del autor. En el cuadro «Paisaje interior I», a partir de una fotografía del paraje natural de la Font Roja de Alcoy, recrea una impresionante pintura de temática épica contemporánea en la cual aparecen minuciosos y detallados personajes, que denomina utópicos, y que él representa huyendo del control de las cámaras y del sistema. Otros cuadros, como, por ejemplo «Fenomenología cromática» (2017), siguen la línea imaginaria con pinceladas sueltas en un espacio coronado por unas nubes coloridas realizadas con espray, una técnica propia del graffiti, movimiento del cual proviene, todo en un clima lluvioso. Además, lo acompañan collages de contenido y estética dantesca con sarcasmo político.
Las pinturas de Germán Bel / Fasim son ventanas metafóricas con vistas al alma del autor, con un claro sentido performativo en que el fundamento está en la visión como proceso y en el discurso conceptual. El punto de partida es la obra «Paisajes borrados 8», cuadro que empezó en 2021 a partir de la superposición de capas y capas borradas que la obra va experimentando, resultado de una larga y consolidada trayectoria artística. Este desarrollo de su obra continúa con piezas como por ejemplo «Paisajes de la huerta II» o «La estela de las luciérnagas», ambas, composiciones del 2023 insinúan y sugieren un paisaje poético e imaginario. De hecho, en la última pieza, un camino iluminado por manchas claras, marca la impronta que grandes pintores anteriores como Sorolla o Velázquez han podido dejar en su trabajo. Pinturas donde el autor reflexiona sobre la eliminación del territorio natural, por las masas de hormigón que exterminan el paisaje de la esfera terrestre. Un acto invasivo que rememora esta necesidad humana de reafirmar la existencia misma y de firmar «Yo he estado aquí» en las paredes, idea romántica característica del grafito que, desde el siglo I a. C., se pintaba en Pompeya.
La creatividad de Tanya Heindrich, artísticamente conocida como Stillo Noir, extrae la verdadera esencia de los objetos. Su arma de expresión son el blanco y el negro, con los cuales juega como la luz y la sombra y genera composiciones inspiradas en elementos de la natura y del paisaje urbano. Una visión particular que potencia la belleza de los detalles ampliando en una escala mayor elementos desapercibidos a simple vista por el resto de humanos. De apreciaciones como por ejemplo el dibujo que conforma el trazo de una hoja o la estampa de las baldosas de hormigón, resultan obras como «Alcantarillado año 1926» o «Agua potable». Un estudio que complementa con los paisajes aéreos como los que vemos en «Atardecer en el campo» o «Estudios aéreos», trabajos que contrasta y con los cuales juega y que transforma en magníficas obras abstractas.
Paisaje urbano
Según Walter Benjamin, fue la ciudad la que creó para la literatura la figura del paseante, una persona que deambula sin rumbo por la ciudad. El paseante recibe los mensajes que comunica la ciudad, una gran fuente de inspiración para muchos artistas. Para el artista Xavi Ceerre, la calle está repleta de lugares, texturas y colores que lo transportan a la infancia. Para esta exposición, Ceerre abandona el apoyo tradicional y usa piezas de carrocería industrial y papeles de periódico para pintar. A los vehículos siniestrados, les da otra vida pasándolos de medio de transporte a medio artístico y rememorando el producto manufacturado relacionado con el pasado cultural de Alcoy, la ciudad donde nació. Titula obras con nombres de parques alcoyanos como es del caso de «Cantagallet» o «Romeral». Esta última oculta una superficie inferior cubierta de blanco, un claro pentimento (arrepentimiento en italiano) o borrado, parte del proceso creativo de Ceerre, una técnica que comparte con compañeros de esta misma exposición. Con el papel de periódico habla del documento informativo de las poblaciones y pinta sobre este con un parecido al arte macro esquemático. Todo ello, nuevas producciones abstractas, fruto de manchas y dibujos accidentales, que nos transportan a la pintura gestual de Pollock.
El paso del tiempo va modelando las ciudades. Jorge Luis Borges alude a un mapa del mundo, el más perfecto que puede existir, tan grande como el mundo mismo. Y diría que la ciudad actualmente es similar porque crece y crece hasta hacerse tan grande como el mundo, y el mundo es una ciudad inmensa. De una nueva visión aérea, horizontal y urbanística del paisaje de Alcoy trata la obra de Lluïsa Penella. Varias miradas desde diferentes enfoques nos trasladan del macro paisaje al paisaje tradicional y al micro paisaje. Obras con las cuales el artista quiere perpetuar en la memoria el paisaje y la identidad territorial con pinturas que se paran en el tiempo y actúan como un archivo histórico. Dos obras de grande formado –«Paisaje horizontal» y «Paisaje vertical»– y una instalación que dibuja la línea del recorrido de las murallas de Alcoy y las torres como punto de unión: el Portal de Riquer, la Valora, la Loba, Aiça, la del Andén o la del Postic, la de Cocentaina o portal del Castell, el sector nordeste y el portal de Penàguila, con las texturas de los restos amurallados que todavía permanecen y mantienen la función simbólica del orden territorial pasado.
Para acabar, la realidad y la sencillez resultan desestimadas en las abstracciones de Javier Pérez / Roice183. Con una producción ligada en las áreas que transita: las ciudades y los extrarradios donde practica el grafito. El paisaje urbano y todo el que arrastra como pintadas, tagging, papeles, dibujos, escombros, residuos, etc. Forman parte de su proceso creativo. Mediante pinceladas rápidas y espontáneas, que suma y resta, el artista conforma veladuras y consigue degradados. Estos borrados en que el autor se libera de todo control, son impulsos que le nacen de su génesis de artista de calle, en que resalta el carácter efímero de las producciones. Los cuadros de Roice183, podríamos decir, son retratos íntimos que expresan sentimientos mediante elementos arquitectónicos que combina y superpone con formas puras y planas que otorgan dimensionalidad a las composiciones. Estructuras y formas que reinciden y mudan para llegar al contacto con la natura y que nos recuerdan a Klee y al collage vanguardista con acentos cubistas que veremos en obras como «Dos no hablan si uno no quiere» o «Poner puertas en el campo», con los cuales determina un juego entre la realidad y la ilusión óptica.
Es así como en un mismo espacio dialogan diferentes perspectivas y puntos de vista sobre el paisaje que los seis artistas reinterpretan dentro de un marco abstracto y un lenguaje plástico que bebe de los grafitos y del arte urbano, desconocido para muchos a pesar de que existe desde hace casi 60 años. Es en las producciones de distintas técnicas y materiales donde el espectador podrá identificar las influencias de los movimientos de la calle como en los borrados, las texturas, los apoyos, la conceptualidad y sobre todo el sentimiento que los une. La fuerza y la energía de las obras nos hablan sobre la importancia del territorio, la natura, la historia, la identidad, tan necesarias para vivir, como un grito de supervivencia.
Arte es una palabra demasiado corta para el peso que tiene en nuestras vidas. Este proyecto artístico es una manera de contar al público todo un fenómeno que culmina en la Sala de la Llotja de San Jorge de Alcoy y que traslada el arte de la calle a la sala institucional. Una iniciativa que coincide con el festival Urban Skills que organiza la Concejalía de Juventud, una efeméride en que algunos de los artistas han participado en ediciones anteriores y que completa el recorrido con esta insólita y novedosa exposición en la ciudad de Alcoy.
Fechas: Del 3 de octubre al 1 de diciembre de 2024
Lugar: Llotja de Sant Jordi, Alcoy – Alicante
