Galería de Arte A Ciegas presenta la nueva exposición del artista Antonio Guerra titulada Elevar la tierra, desaparecer. Un proyecto donde Guerra examina, a través de diferentes entornos mineros en fase de reconversión, la interacción entre procesos postextracción y producción de imágenes, poniendo de relieve las materialidades, capas y transformaciones presentes en estos enclaves.
«A partir de un cuerpo de trabajo híbrido que transita entre la fotografía, la escultura y la instalación, Elevar la tierra, desaparecer establece conexiones entre los procesos de transformación antropogénica derivados de la industria minera y los de producción de las imágenes. Para ello, Antonio Guerra ha centrado su trabajo en tres enclaves mineros: la Gran Corta de Fabero, en León, que llegó a ser el mayor lugar de extracción de carbón a cielo abierto de Europa, las Minas de Riotinto, en Huelva, centradas especialmente en cobre y hierro, y las minas de El Sabinar, en Alicante, un lugar significativo en el caso del ocre.
El artista pone sobre la mesa la imposibilidad de aprehender la complejidad de la crisis multifactorial que subyace a la emergencia ecológica, y nos invita a pensar la imagen desde otros lugares, como el de entender la idea de paisaje como construcción ideológica o el de la exploración en torno a los nuevos usos del suelo. Algunos de los territorios analizados por Guerra –actualmente en procesos de reconversión– nos conducen a una idea de regeneración que también habla de reparación epistémica, de rehabilitar para releer el pasado, reflexionar sobre el presente y dibujar otros escenarios de futuro desextractivizados.
Del mismo modo, se establece una analogía entre los estratos geológicos como resultado de las diferentes capas geológicas y los estratos humanos, sociales y medioambientales que se imbrican a estas. El trabajo de Guerra se sitúa en esos intersticios, en esos tránsitos temporales, en las diferentes materialidades que son resultado de los primeros y el modo en que estas pueden convertirse en dispositivos visuales. La idea del desecho cobra aquí un protagonismo esencial, al trasladar algunos de los despojos de esos entornos extractivos a la materialización de las propias obras. La misma motivación lleva al artista a valerse de los propios elementos de creación de imágenes para la configuración de las piezas, produciendo asociaciones improbables: tintas de plóter en diálogo con residuos líquidos, tecnología con fósiles o residuos de impresión con restos encontrados en las propias minas. Explora así la materialidad del paisaje y la transitoriedad de las imágenes de manera elástica, donde a la memoria se le une un sentimiento de superación, enfatizado por la sublimación de la imagen de las vastas intervenciones antrópicas.
Con todo ello, se configuran una suerte de paisajes con los que Guerra acorta distancias entre el plano discursivo y el material, y entre categorías dicotómicas como ficción/realidad, natural/artificial, naturaleza/cultura o forma/objeto, al tiempo que abre una puerta a repensar el papel de la construcción de imaginarios en plena crisis climática» Blanca de la Torre.
Artista: Antonio Guerra
Fechas: Del 16 de noviembre al 19 de enero 2024
Lugar: Galería de Arte A Ciegas, Madrid