La Galería Helga de Alvear presenta una selección de fotografías de Candida Höfer (Eberswalde, 1944) realizadas entre los años 2000 y 2014. Bajo el título Memorias en tiempos rápidos, esta exposición permite a la artista alemana reflexionar sobre la velocidad relativa del tiempo y los efectos colaterales de esta dinámica en el registro de nuestra experiencia de vida.
La influencia de Bernhard y Hilla Becher es fundamental en la forma en que Höfer centra su atención en el objeto por encima de las personas, plasmada más concretamente en el protagonismo de los espacios interiores. De manera similar, a través de su herencia de la metodología científicamente precisa de los Becher, busca comprender la verdadera naturaleza del objeto desde una posición neutral y objetiva con el fin de permitirle ser él mismo.
A pesar de no organizarse en torno a tipologías estrictas, Höfer pretende crear series que remitan sistemáticamente a espacios interiores y más concretamente a lugares cuya función es custodiar y proteger la historia y la memoria cultural. Instituciones públicas o semipúblicas donde se conserva el patrimonio cultural y se difunde el conocimiento. Por tanto, su obra registra lo que podríamos definir como arquitecturas del conocimiento, ya que en ellas se deposita y archiva el conocimiento; una vena conceptual que la vincula con sus mentores.
La motivación subyacente que impulsó el trabajo de Bernd y Hilla Bechers fue el uso de registros y archivos fotográficos como herramientas para preservar un paisaje en constante cambio. Habiendo crecido en Siegerland, la representación de plantas industriales abandonadas y a punto de desaparecer fue para Bernd una forma de preservar su infancia. Asimismo, para Höfer existe el deber de recuperar aquello que está en riesgo de extinguirse; es decir, la función de estos espacios de conocimiento. Teniendo en cuenta la evolución de cómo consumimos contenidos culturales desde el inicio de la revolución de las comunicaciones, esta es una reflexión más que pertinente y una referencia al papel histórico del medio fotográfico como herramienta para la conservación de momentos específicos en el tiempo.
Despojada de toda presencia humana, la arquitectura está imbuida de un matiz de extrañeza: el de un objeto idealizado. Considerando que estamos hablando de espacios abiertos al público –lugares estrechamente relacionados con las personas– su ausencia permite al artista ampliar el horizonte temporal desde el momento de su creación hasta la actualidad. Esto permite una coexistencia simultánea de diferentes lugares, recuerdos y épocas dentro de una misma arquitectura.
Múltiples temporalidades acumulan capas de historia compartida y experiencias individuales a través de su interacción con el patrimonio cultural que se encuentra en estos espacios. Candida Höfer está interesada en última instancia en proteger dicho patrimonio mediante un registro fotográfico. Esto sirve como una forma de activismo contra una comprensión del tiempo contaminada por el uso de tecnologías que nos invitan a restablecer nuestro patrimonio cultural cada día.
Los interiores de bibliotecas, teatros, museos, edificios públicos, instituciones y espacios de oración son los principales protagonistas de la serie fotográfica de Höfer. Esta selección actual incluye uno o más ejemplos de cada uno, excepto el último tipo. Los numerosos lugares donde se encuentran (San Petersburgo, París, Roma, Basilea, Lisboa, Berlín, Weimar, Madrid y Buenos Aires) dan fe de la ambiciosa extensión geográfica de su trabajo, que se centra más específicamente en Europa.
Fechas: Del 9 de mayo al 13 de julio de 2024
Lugar: Galería Helga de Alvear, Madrid