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Written by: Artistas

En el taller de ISABEL SERVERA

Isabel Servera nace y se cría en Mallorca en una familia de abuelos artesanos del garballó (palmito) y la cuerda, hecho que marca la evolución artística de la artista. Se forma en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona y realiza un máster en Producciones Artísticas e Investigación que le proporciona seguridad en su búsqueda artística.

Set1-V 2020. Rotulador sobre papel

Sus primeros trabajos fueron en figurativo pero pronto se va minimizando y abstrayendo lo esencial de su trabajo. Empieza a interesarse por la intervención del azar y el tiempo, experimenta en esta línea: Deja 30 horas en tinta unas hojas consiguiendo efectos que recuerdan a paisajes; se fascina por los restos sobrantes en un corcho de anuncios de pared cuando todo es arrancado… Un trabajo que cambiará el rumbo y la razón de ser de su obra consistió en marcar cada uno de los cuadrados de una hoja cuadriculada. Fue un trabajo repetitivo, mecánico, con papel y bolígrafo, tardó 8 horas. Le recordó a un trabajo de fábrica, hecho que le fascinó así como el resultado de dicha intervención: el azar, error y el gesto condicionado de cada momento se mostraba en el trabajo final. De ese punto parte la obra de Servera hasta la saciedad y lo impensable.

Set1.VIII 2020. Rotulador sobre papel

La obra de Servera se centra en la práctica pictórica y sobre todo en la acción de esta. No hay esbozo, ni estudio previo; tampoco percepción del resultado. La artista se centra en la elección del material, normalmente de oficina, y la ejecución de un trabajo cíclico, ordenado, mecánico y estructurado.

Me dejo llevar por el orden de fábrica y el gesto repetitivo, pero a la vez, lo que debería ser algo aburrido, gris o predecible termina con un resultado final totalmente inesperado, incluso para mí. la superposición de unos con otros acaba generando multitud de colores nuevos inexistentes al inicio de la obra. Este hecho, el de jugar con lo inesperado, me engancha”. Isabel Servera.

Punt i seguit, 2017-2019. Tinta sobre papel. 100x70cm (detalle)

En la obra de Servera se establece una relación y dialogo entre la pintura y los procesos artesanales. Margen de error, azar y tiempo son factores que dan riqueza a su obra como en cualquier objeto artesanal – cada día es más consciente de su origen e influencia familiar. Podríamos decir que la obra de Servera conlleva un proceso artesanal con un resultado artístico. A partir de este concepto los formatos e intervenciones artísticas de Servera siguen esta línea hasta lo inimaginable como en la obra Punt i seguit (2017-2019), en la que invierte dos años de trabajo continuado, cosa que me hace cuestionar cuanto arte dejamos de percibir simplemente porque estamos condicionados por el tiempo.

Punt i seguit, 2017-2019. Tinta sobre papel. 100x70cm 

Los materiales corrientes de oficina son sus herramientas de trabajo. Con los rotuladores sigue una pauta ordenada de movimientos lineales que va generando patrones, estableciendo así una relación con las tramas que conforman los trabajos textiles. Sigue el orden establecido por el mismo fabricante de rotuladores, generando con su intervención otras tonalidades. Lo mismo hace con los celos de colores. Utiliza también papeles triturados de oficina, los manipula, los entrelaza creando un tapiz de papel. La constancia de la repetición rutinaria de unos patrones lleva a un resultado sorprendente que el ojo humano no ha sabido predecir en un inicio.

ST6 2019. 14178 piezas. 100x70cm (detalle)

Una obra tan mecanizada y con patrones de repetición tan marcados parece que pueda ser amenazada por las nuevas tecnologías, pero por el contrario, Isabel Servera se nutre de las huellas y rastros que esta tecnología deja sobre soportes para adaptarlos a nuevos procesos artísticos. La artista transmite el disfrute de la acción en su trabajo y seguridad en el amplio abanico de posibilidades que puede nutrir su obra.

Etiquetas: Last modified: 7 noviembre, 2022