Desde Nueva York, Boris Torres nos presenta su trabajo y nos habla de su concepción del arte, sus procesos y también de la situación a nivel político-social que allí se está viviendo así como de sus implicaciones en el terreno artístico, tanto a nivel personal como grupal.
PAC – Aunque tu formación y desarrollo artístico se ha producido íntegramente en EEUU siempre reivindicas tu origen Ecuatoriano. ¿Cómo ha condicionado tu lugar de nacimiento en tu trabajo?
Boris Torres – Sí, cuando emigramos a los Estados Unidos todo cambió para mi de maneras buenas y malas, dejé todo lo que amaba en Ecuador y en un lugar nuevo sentía que necesitaba conservar mis raíces y por eso me identifico como Ecuatoriano, y al crecer en Nueva York encontré oportunidades personales y de expresión artística que no hubiera tenido en Ecuador. Esta experiencia ayudó a formar mi carrera artística aunque no ha estado directamente condicionada por el lugar donde nací.
PAC – ¿Hasta qué punto consideras que el componente étnico está vinculada al sentimiento Queer?
Boris Torres – Creo que si eres una minoría étnica -o sea no blanca- en la sociedad en la que vives y también eres queer, las dos están entrelazadas y no pueden separarse. Sobre todo si vives en un lugar intolerante, afectará todo lo que hagas, lo aceptes, seas consciente de ello o no, o si lo eliges o eres capaz de expresarlo en tu trabajo.
PAC – Tuve la suerte de llegar hasta tu trabajo a través de tu participación en el maravilloso film Keep the lights on del maestro y referente absoluto del cine lgtbiq+ Ira Sachs, ¿cómo fue esta colaboración en la que yo encontré un poderoso e íntimo diálogo entre cine y pintura?
Boris Torres – ¡Gracias! La colaboración nació orgánicamente. La película se basa en la relación que tenía Ira (mi esposo) antes de que nos conociéramos y la película termina el día que nos conocimos. En la película, su personaje conoce a un artista como yo y cuando Ira estaba escribiendo el guión, yo estaba haciendo muchas de las obras que aparecen en la película. Típicamente cuando cenamos solemos hablar sobre nuestro día, sobre el trabajo de ese día, intercambiamos opiniones y criticas y en ese proceso inicial, Ira decidió que estos trabajos podrían ser una forma de comenzar e introducir la sensación de la película, en los créditos iniciales.
PAC – Centrándonos en aspectos más específicos de tu práctica artística, has manifestado un determinante interés en el soporte, en el medio como campo de investigación y experimentación, ¿podrías explicarnos cómo es tu proceso creativo?
Boris Torres – Soy una persona muy curiosa, y creo que con más edad me doy permiso para ser más libre en diferentes aspectos de mi vida y esto también pasa en mi trabajo, quizás cuando era un artista joven, habría tenido miedo de probar un nuevo medio como el collage o tal vez lo hubiera descartado. Hacer arte es uno de los mayores placeres de mi vida, estoy constantemente inspirado y afectado por las personas y las cosas que me rodean y eso es lo que impulsa mi proceso y los medios.
PAC – Partes de una capacidad técnica para el dibujo y la pintura verdaderamente magistral que paulatinamente has ido abandonando a favor de otro tipo de intereses ¿Has agotado esa vía?, ¿cuáles son tus necesidades expresivas ahora?
Boris Torres – Siempre me ha gustado la escultura y es algo a lo que he vuelto algunas veces a lo largo de los años y por ahora siento que lo he abandonado. Hago trabajos de video diferentes, pero todavía no he encontrado la manera de exponerlos. Lo que más me interesa ahora es pintar a personas en vivo, es una práctica más o menos nueva para mí en la cual estoy descubriendo maneras diferentes como usar la pintura, mas esporádica y con mas riesgos, e intentar que la pintura capture una sensación de un momento en vivo o la energía de una persona y de un momento que compartimos los dos, el modelo y yo.
PAC – Tu trabajo siempre ha discurrido por los territorios de la figuración ¿está relacionada con tu interés por los procesos identitarios?
Boris Torres – Me gusta esta pregunta; No lo he pensado de esa manera, pero ahora parece obvio que la figura refleja una exploración de mi identidad, sobre todo cuando era un joven artista que descubría y reprimía cosas de mí mismo que aparecían en mis obras, como mi identidad sexual, fetiches, identidad de género, abuso sexual, etc. que presenté de manera directa y confrontativa al espectador, algo que aun se me hace difícil, temía que mi trabajo fuera visto como demasiado literal para los críticos, o simplemente se etiquetaría como pornografía, que creo que es un género que se malinterpreta y se descarta injustamente. Durante muchos años me mantuve alejado de expresarme de forma abstracta porque creo que las cosas que son tabú para uno mismo o en la sociedad es necesario representarlas visualmente como son; es una forma de enfrentarlas directamente y revelarte a los espectadores como eres y en carne viva.
PAC – ¿Cómo consideras que el termino Queer, adjetivado, según la propuesta de David J Getsy se ha ido transformando? ¿ha terminado siendo domesticado, ha perdido su significación fagocitado por las corrientes mayoritarias?
Boris Torres – Estoy de acuerdo. La palabra queer se ha transformado de una palabra negativa a una palabra normalizada y tal vez positiva. Lo que me gusta de ella es que es una palabra inclusiva para las personas que buscan nuevas formas de identificarse. Puede que sea una palabra que pierde su poder en confrontar las normas que suprimen lo que es “diferente”- mientras las personas queer continúan ganando reconocimiento y aceptación en algunas partes del mundo, tiene sentido que la palabra queer también esté ganando reconocimiento y aceptación y se considere menos amenazante.
PAC – En tu última serie pictórica Rebels I Know hablas de la importancia de la comunidad y de la existencia de un “tiempo queer” que atraviesa la espacialidad física. ¿Puedes desarrollarnos un poco más estos conceptos?
Boris Torres – Me siento afortunado de ser parte de una comunidad artística queer diversa que se apoya y es más inclusiva, me refiero a este aspecto, que hay lugares en que estamos viviendo en una época queer diferente a las épocas reprimidas y estigmatizadas de el pasado – y aunque espero que siga así, mejorando en el futuro, nada es seguro.
PAC – Realizaste una primera exposición de estos retratos en 2019 que ha tenido continuidad en una segunda muestra en 2020.
Boris Torres – Sí, continuaré haciendo estos retratos mientras pueda, es una forma de estar conectado con otras personas, es una cita, una experiencia íntima que me permite ralentizar el tiempo y conocer a alguien mejor cara a cara.
PAC – ¿Cómo estáis viviendo la comunidad artística en Nueva York estos tiempos extraños de pandemia y de situaciones políticas comprometidas?, me refiero mas concretamente al movimiento Black Lives Matter y al ascenso y caída de Donald Trump.
Boris Torres – Los retratos en vivo que he pintado en estos últimos par de años me han ayudado a mantener estas conexiones con la comunidad artística de Nueva York. Con la pandemia esta practica se detuvo inmediatamente, de un momento a otro nuestras vidas cambiaron. Yo vivo con mi esposo y la madre de nuestros mellizos en un edificio de muchos apartamentos en Nueva York donde golpeó la pandemia fuerte. Teníamos mucho miedo, más por nuestra hija e hijo que tienen 8 años, tuvimos la suerte de poder ir a la casa de una amiga fuera de la ciudad. No estuvimos en Nueva York durante las protestas de Black Lives Matter. Para mí este movimiento es muy importante, y espero que siga adelante porque muestra al mundo la otra cara de los Estados Unidos donde 79 millones de personas votaron por Trump, que significa que hay 79 millones de personas que toleran las ideas racistas e intolerantes de un movimiento extremo y represivo.
PAC – ¿Qué importancia tiene para ti la sexualidad, en la vida, en la sociedad y en el arte?
Boris Torres – Como persona queer, mi sexualidad me ha impactado a lo largo de mi vida, con momentos en los que la culpa y el miedo aún se filtran y quiero esconder quien soy, a veces me da miedo dar un beso a mi esposo en un lugar publico, y aveces aun siento timidez en decir la palabra “mi esposo”. Mi sexualidad también me ha enriquecido profundamente, es una parte grande que aun guía mi trabajo y me a llevado por un camino en mi vida personal donde mis sueños se an echo realidad como esposo y padre.
PAC – Y, ¿cuál es tu concepción de la idea de la masculinidad o como piensas que esta debería entenderse en el siglo XXI?
Boris Torres – Esta pregunta se me hace difícil de contestar de una manera mas abierta. Tengo muchas ideas negativas sobre lo que la masculinidad significa para mi por mis pasadas experiencias personales y tiendo a generalizar lo que es la masculinidad, por ejemplo: que es ser una persona misogonista al reprimir sentimientos y rasgos que son femeninos y, por tanto, malos, ademas significa tener rasgos dominantes y violentos y tener que saber como pelear. Pero también conozco personas masculinas que no son así y como padre de un hijo estoy dándome cuenta que la masculinidad puede significar mucho, mucho mas que solo esas cosas negativas en mi cabeza, significa ser cuidador, sensible, amable y gentil y dulce. Espero que la masculinidad se exprese más y mas de estas maneras en nuestros hogares, en nuestro hijos y en la cultura popular.
PAC – ¿Qué opinas de la hiper-exposición del cuerpo al que estamos asistiendo hoy en día a través del desarrollo de las redes sociales?
Boris Torres – Internet ha facilitado que las personas satisfagan virtualmente sus deseos sexuales, sin tener contacto físico. Creo que este desahogo podría ser saludable para muchas personas. Por otro lado creo que muchos jóvenes no comprenden los riesgos que corren cuándo se exponen en las redes. Cualquiera puede usar tus imágenes sin tu permiso y podría ser algo de lo que te arrepientas más tarde como adulto.
PAC – Como concepto liquido y variable a lo largo de la historia, ¿cuál piensas que debe ser en nuestro momento la función del arte?
Boris Torres – Históricamente, el propósito del arte ha tenido una función educativa, política y estética en las sociedades para educar sobre la historia, la religión, etc. Creo que esta base es importante en este momento, rodearnos del placer de la belleza creo es muy importante. Y especialmente ahora el uso del arte político, por ejemplo – como en los mensajes de The Guerrilla Girls y Pussy Riot que son fuertes y pueden llegar virtualmente a una audiencia más amplia que todos puedan acceder y no solo las personas dentro de el mundo del arte.
PAC – Y, ¿qué compromiso deberían adquirir los artistas con la sociedad?
Boris Torres – Un reto que me planteo es ser un artista más inclusivo. En pensar y trabajar de una forma menos automática, recientemente e realizado grandes collages basados en fotos pornográficas de los años sesenta, por ejemplo de una orgía de hombres de raza blanca, pero vi que esta era una oportunidad para desafiar esa idea de belleza y en resultado, los collages son colores sólidos de figuras que aluden a otras razas. Como artistas, creo que podemos estar más atentos a lo que presentamos en el mundo para el espectador y ya de ahí, intentar ser inclusivos de forma honesta y menos forzada.
PAC – Por último, háblanos del que si no me equivoco, es tu proyecto más inmediato: Queer Family Portraits
Boris Torres – El año pasado vi un retrato que un padre había pintado de sus hijos en el Museo Sorolla de Madrid y me conmovió mucho. Pensé en ese momento lo maravilloso que es ser papá y lo mucho qué amo a mis hijos y lo feliz que soy. Este retrato fue pintado con mucho cariño por Joaquín Sorolla. De ahí surgió la idea, me di cuenta de que nunca había visto un cuadro en un lugar artístico público como un museo o galería que representara a una familia como la mía, parejas homosexuales con hijos. Ahora estoy pintando retratos de estas familias queer, y quizás pueda compartirlos con ustedes algún día pronto.
Etiquetas: activismo, Arte Queer, Boris Torres, Desnudo, lgtbiq, Queer, Retrato Last modified: 6 septiembre, 2023