Eduardo Cortils llega al CAB de Burgos con el proyecto Un-Steady. n problemas ambientales, propuesta que parte de los llamados desastres naturales recientes, algunos de ellos perfectamente reconocibles (por su inmediatez) para negar su condición natural e identificarlos como resultado de la acción del hombre.
Ya nadie ignora que la mayoría de los crecientes problemas medio ambientales de hoy no se deben solo a las conocidas catástrofes naturales en aumento, sino que son también debidos a causas antropogénicas, fruto de un hecho cultural muy arraigado en occidente y que desde la posmodernidad vienen denunciando las ciencias físicas y ecológica; a saber, que durante más de dos siglos creemos prosperar de espaldas a una naturaleza a la que inevitablemente pertenecemos, pero dañamos. (Eduardo Cortils).
Las fotografías de Eduardo Cortils documentan e interpretan por igual. Recogen el suceso, pero analizan la causa. Intervenidas pictóricamente con textos, datos científicos y signos gráficos (barras y círculos de color) que replican los códigos utilizados por los medios de comunicación para explicar el calentamiento global. Secuencias cromáticas para las que Cortils emplea una estrategia conocida como dazzle (camuflaje disruptivo), según fue formulada por el artista británico Norman Wilkinson en la I Guerra Mundial. Mediante el uso de formas geométricas de colores contrastados, los dazzle eran capaces de alterar los patrones de percepción de los objetivos militares en los bombardeos enemigos.
Cortils sigue la estela de otros artistas que ya se interesaron por la distorsión ocular; así, con esto patrones reconfigurados consigue atraer la atención del espectador, invitando a indagar sobre su significado.
Los dazzle, utilizados también como recurso en el contorno de las imágenes, son los protagonistas de una de las acciones sobre el territorio protagonizadas por Cortils en sus ‘talleres de participación e intervención en el paisaje’.
Realizados en el entorno de las Merindades de Burgos, donde vive el artista desde algunos años, Cortils invitó a sus vecinos a utilizar estos observatorios dazzle entendidos como una propuesta plástica en el hábitat rural, pero también como una ventana desde la que ver de otro modo el medio en el que vivimos, y de ser vistos a la par. El observatorio se transforma en un cuerpo extraño en el paisaje, casi un accidente visual que por añadidura invita a cuestionarnos el resto de artefactos introducidos aleatoriamente en la naturaleza.
El mundo atravesado por la pandemia y por la desolación que ésta ha provocado está necesitado, más que nunca, de un nuevo resurgir. El trabajo realizado por Eduardo Cortils para el Centro de Arte Caja de Burgos CAB nos obliga, en sus propias palabras, a parar la carrera; por un problema infeccioso hemos detenido la marcha. Nos encontramos hoy frente al primer frenazo de la cultura del beneficio. Se plantean así un emocionante reto de supervivencia, una crisis económica sobrevenida, pero también el re-aprendizaje de algo que parecíamos haber olvidado, la interdependencia.
Artista: Eduardo Cortils
Fechas: hasta el 24 de enero de 2021
Lugar: CAB, Burgos