9.980 km. El horizonte que nos separa. Fotografía argentina y española. DA2 Salamanca, 27 de junio – 28 de septiembre, 2014. Fotografías de Lorena Guillén Vaschetti, Valentín Vallhonrat, Celeste Martínez, Gerardo Repetto, Javier Vallhonrat, Eriz Moreno, María José D’Amico, Lara Almarcegui, Irene Cruz, Alejandro Amaraz y Esteban Pastorino.
El DA2 de Salamanca muestra el panorama de la nueva fotografía argentina y española en la exposición 9.980 km. El horizonte que nos separa. La muestra está comisariada por Fernando García Malmierca en colaboración con el Festival de la Luz de Argentina –que incluye esta exposición dentro de su programa general–, un evento que reúne distintos encuentros relacionados con la fotografía artística internacional.
En esta exposición el comisario ha establecido a través de la fotografía actual en Argentina y España, un diálogo entre una selección de artistas que están construyendo imágenes con una mirada más intimista, más centrada en lo personal. En palabras de Fernando García Malmierca «la nueva fotografía mira para dentro y vive hibridada con otras disciplinas (…) La fotografía vive un momento de gran vitalidad y originalidad, ofreciendo los artistas una visión que no olvida las fuentes y referentes más históricos, pero que abre nuevas vías de comunicación y conocimiento».
La muestra no pretende generalizar sobre el panorama de la fotografía contemporánea, sino acercar estos dos ámbitos de creación en una puesta en común a través de miradas, estéticas y conceptualismos. Con un fuerte compromiso por mostrar la dualidad entre lo cercano y lo lejano, entre lo local y lo global los artistas de uno y otro lado miran al horizonte que nos une y a la vez nos separa creando imágenes cargadas de nueva poética. Once artistas que nos proponen distintos proyectos artísticos y lecturas conceptuales que forman parte de proyectos artísticos en proceso. Por ello lo procesual tiene en estos artistas una gran peso frente a la imagen objetual en sí misma.
Los proyectos fotográficos expuestos en DA2 presentan poéticas relacionadas con la naturaleza y el entorno arquitectónico que nos rodea en los trabajos de Eriz Moreno, Esteban Pastorino, los hermanos Vallhonrat, Alejandro Almaraz y Lara Almarcegui. En el proyecto 1:1 de 2010, Eriz Moreno ha recorrido las distintas Madrid de Colorado, Nuevo México, Virginia y España en búsqueda de la neo-construcción postcolonial. Mientras, Esteban Pastorino nos propone reflexionar sobre lugares fronterizos que él mismo ha construido y donde relativiza sobre lo real y lo irreal. Lo real y lo imaginado en los paisajes culturales también son el motivo de la serie E.T.H. de Javier Vallhonrat, donde reflexiona sobre la construcción romántica del paisaje y el paisaje moderno intervenido. Por otro lado, Alejandro Almaraz reconstruye la mirada en la serie Lugares donde nunca estuve, interviniendo en aquellos edificios culturales manidos por la fotografía turística, las postales y el ritual fotográfico mediante el cual ya no miramos con nuestros ojos sino a través de los dispositivos fotográficos. Sobre la imagen turística también habla Valentín Vallhonrat en Vuelo de ángel, donde ha recorrido los edificios más emblemáticos del mundo subvirtiendo la perspectiva y reflexionando sobre la percepción de las imágenes: si en la antigüedad la mirada se producía a ras de suelo en la contemporaneidad la tecnología nos permite mirar la historia –a través de sus paisajes arquitectónicos– desde un punto de vista elevado, privilegiado. Dentro de estos procesos cabe destacar el trabajo de Lara Almarcegui y su serie Demoliciones, descampados, huertas urbanas realizada entre 1995 y 2002 donde cuestiona las prácticas del urbanismo contemporáneo como mecanismo del poder económico para modificar los espacios en contra de las necesidades de sus habitantes. En este sentido su práctica artística destaca por la clara vocación testimonial y documental de sus trabajos.
La naturaleza, los espacios arquitectónicos y la presencia y ausencia del ser humano en esos paisajes es protagonista en los trabajos de Irene Cruz, María José D’Amico, Lorena Guillén Vaschetti, Celeste Martínez y Gerardo Repetto. Reflexiones sobre el silencio, los espacios abandonados o la memoria con una gran carga poética. Irene Cruz representa en este sentido ese nuevo aire de la fotografía contemporánea, no solo por ser la más joven de la muestra, sino por la mirada hacia ese horizonte que está cargado de dualidades. Su trabajo Inner Tales de 2011 parte de lo imaginado convertido en real, de lo invisible que se vuelve visible, de un imaginario cargado de metáforas donde propone un juego performático cuyo punto de partida es la misma naturaleza y la luz es el personaje que la habita. En contraposición, María José D’Amico que entiende la fotografía como espacio del silencio, testigo silencioso de los hogares habitados en el pasado y que se presentan desolados por las ausencias. La serie Bien de familia es un conjunto de imágenes nostálgicas que reconstruyen historias que se resisten a desaparecer en los hogares abandonados. Tal y como hace Lorena Guillén Vaschetti tratando de reescribir la historia familiar a partir de diapositivas y negativos del archivo de la familia. Historia, memoria y silencios reflexiona sobre el peso del pasado y la memoria que se mantiene oculta, a la vez que construye una historia a partir de recuerdos, anécdotas y narraciones. Por otro lado, Celeste Martínez reflexiona en sus imágenes Didáctica y Meladie sobre la enfermedad como metáfora social y lo que la naturaleza nos aguarda en silencio: la muerte. Presencia y ausencia humana también en las Heliografías de Gerardo Repetto que recurre a una técnica fotográfica antigua, casi en desuso, para realizar retratos a escala natural que son recuerdos en forma de sombra.
La nueva fotografía argentina y española muestra un horizonte muy próspero en lenguajes y tendencias artísticas. 9.980 km no es la distancia que nos separa sino el diálogo que nos une en el territorio poético de lo común a través de 55 fotografías y una proyección de 80 diapositivas de once artistas diferentes. Con esta exposición el DA2 de Salamanca se resitúa como centro de arte transfronterizo comprometido con la difusión de las prácticas artísticas contemporáneas, la exhibición de talentos emergentes y la vigencia de artistas consagrados.
Más información en la web de DA2 Salamanca.
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