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Giselle Lucia Navarro

Written by: arte Arte Contemporáneo Arte Textil Exposiciones Instalación

Giselle Lucía Navarro: Domesticar el hilo

Hay algo de agresividad en la forma de domesticar el hilo
para que se mantenga firme.
Apretar y destrozar los dedos,
mientras construyes una forma
que canta su belleza efímera
.
Giselle Lucía Navarro

La propuesta artística de Giselle Lucía Navarro (Alquízar, 1995), si bien en ciernes, ha ido conquistando un espacio dentro de la escena plástica cubana actual. A buen ritmo, y con paso certero, ha sabido instaurar una estética propia, que se deslinda entre sus contemporáneos. Desde sus tempranas incursiones en el medio una constante ha signado su trabajo: el empleo del textil como materia prima de creación.

 

Vista parcial. Ensoñaciones del reposo, 2025

El conocimiento de técnicas manuales de confección textil -heredado del entorno familiar-, unido a su formación como diseñadora industrial, han condicionado en gran medida su aproximación al llamado arte de las fibras. Aunque su manera de abordarlo parte de la tradición, continuando ese aspecto handmade que históricamente ha tenido la práctica, sus miras distan de entusiastas reivindicaciones al oficio artesanal. En cambio, le interesa explorar sus potencialidades plásticas y expresivas, simpatizando con el legado de referentes internacionales que, desde Gunta Stölzl y Anni Albers en el Taller Textil de la Bauhaus, hasta Aurèlia Muñoz, Magdalena Abakanowicz y Sheila Hicks, han justipreciado el medio per se.

 

Vista parcial. Ensoñaciones del reposo, 2025

En este sentido, enrumba su creación por una vertiente que en los últimos tiempos ha cobrado auge a escala global, mas cuenta con pocos adeptos en el contexto cubano. Y es que, salvo puntuales exponentes, el arte textil en la Isla -en tanto manifestación y/o movimiento artístico- es aún campo yermo, de modestos coqueteos en relación con la valorización que ha experimentado dentro del arte contemporáneo del orbe.

Bajo el título Ensoñaciones del reposo1 presenta la artista su primera exposición personal. Con ella, consolida esa línea de trabajo en el arte de manipulación de la fibra, al tiempo que inaugura una visualidad donde el textil se despliega en búsqueda de una dimensión espacial, corpórea.

 

ENSOÑACIÓN V. Anidar es una forma de resistir. Giselle Lucía Navarro

Ya desde su iniciática participación en Disonancias, exposición colectiva realizada en el Centro de Desarrollo de las Artes Visuales (CDAV) durante la XIV Bienal de La Habana (2021-2022), se aprecia una predisposición hacia la espacialidad en el trabajo con dicho material. Los injertos sagrados -pieza suya que integró la muestra- dotaba al tapiz de un carácter instalativo. Se trataba de una obra in situ en la que el tejido, conformado a partir de prendas de vestir con significación personal donadas expresamente para el proyecto, se disponía sobre un telar vertical y prolongaba en el suelo de la sala expositiva, expandiéndose con cada nuevo aporte. En esta procesualidad el elemento textil devenía recurso diegético, articulando una narración en continuum, atizada con la incorporación progresiva de historias subyacentes en cada pedazo de tela.

 

ENSOÑACIÓN IV. Lo etéreo. Giselle Lucía Navarro

A poco más de tres años, la artista replica y ensancha esta primigenia experiencia. En el marco también de la Bienal de La Habana, esta vez en su XV edición, nos sorprende con una propuesta fresca y contundente que toma en consideración las posibilidades escultóricas del textil. Como si en el tiempo de diferencia entre ambas entregas hubiese estado rumiando esa incipiente inquietud de sacar al tapiz del muro y, por demás, independizarlo de la planimetría.

El conjunto de obras integrantes de la reciente muestra deviene ensayo visual que explora otras maneras de abordar dicha materia blanda. Desde las piezas dispuestas a pared hasta las que se erigen soberanas como esculturas de bulto redondo, asistimos a un ejercicio creativo versátil que intenta domesticar textiles de algodón, poliéster y fieltro de lana a través de costuras, tejidos, macramés; e incluso variaciones de dichas técnicas de confección que su artífice concibe atendiendo a lo que el proceso le va demandando. Y es que, la materialización de sus proyectos, si bien bocetados previamente, termina describiendo una metodología esencialmente intuitiva.

 

ENSOÑACIÓN I. Sortilegio del instante. Giselle Lucía Navarro

“ENSOÑACIÓN VI: La eternidad en los ojos”, “ENSOÑACIÓN II: El vértigo en los ojos” y “ENSOÑACIÓN I: Sortilegio del instante” subvierten la bidimensionalidad del tapiz al hacer emerger de ellos diversas protuberancias: desde intrincados nudos, formados por las propias hebras textiles, hasta cuerpos blandos adheridos, en franca convivencia con la superficie que los acoge. Las obras resultan, más que paños a pared, suerte de tapices-relieve, ricos en texturas y prominencias. No es el caso de “ENSOÑACIÓN VIII: Piedra de vigilia” que, si bien se instala sobre el muro, constituye una forma cerrada sobre sí misma, semiesférica, compacta -si dicho adjetivo orienta de alguna manera sobre la composición de un volumen, a fin de cuentas, suave-.

De igual consistencia, pero exentas en el recinto galerístico, “ENSOÑACIÓN V: Anidar es una forma de resistir” y “ENSOÑACIÓN VII: Para pensar hay que mirar la muerte desde otra altura” se apropian del espacio en sentido quizás opuesto: existen en él, la primera lánguida, replegada en el suelo; la segunda suspendida del techo, conquistando altura.

 

Detalle. ENSOÑACIÓN VI. La eternidad en los ojos. Giselle Lucía Navarro

“ENSOÑACIÓN IV: Lo etéreo” y “ENSOÑACIÓN III: Numen”, por su parte, se configuran a partir del feliz maridaje entre rigidez y suavidad. Pues, cuentan con estructuras metálicas de soporte que otorgan firmeza al material textil, contrastando con su naturaleza blanda. Con este artilugio se permite Giselle explorar morfologías más ambiciosas, que fuerzan los contornos de la práctica, emparentándola con el hacer escultórico. Ambas piezas conquistan una presencia física imponente y monumental, no solo por la escala que alcanzan, sino también y, sobre todo, por la cualidad expresiva de sus formas. Vestidas, arropadas por textiles cosidos, anudados, entretejidos, …, construyen cuerpos abstractos, liberados de ataduras referenciales; amén de que no pocos espectadores encuentren en ellos imágenes familiares, procedentes de la realidad tangible.

A fin de cuentas, las obras no son más que la materialización de pulsiones estéticas del ensueño; imágenes de la intimidad que Gaston Bachelard bautizase como remanentes del mundo material o, más bien, de la sustancia terrestre -para ser más exacta en la cita al autor-. Y es que, la exposición se concibe bajo el prisma bachelardiano al tomar como referente uno de los icónicos textos del filósofo francés en el que reflexiona en torno a las relaciones entre la materia y la imaginación2.

ENSOÑACIÓN II. El vértigo y el reposo. Giselle Lucía Navarro

 

Giselle tensa los hilos, los somete hasta hacer permanecer en la vigilia las formas que pueblan su universo onírico; suerte de criaturas orgánicas, de cualidades visuales y táctiles que invitan al contacto. Más que instalarse, habitan el espacio, lo convierten en un ámbito sensible. Su puesta en escena pareciera arroparnos bajo el manto de una subjetividad que no solo nos adentra en las ensoñaciones de la artista, sino que también nos convida a replegarnos y explorar las nuestras.

Con estas elucubraciones textiles, objetuales, poéticas, la joven creadora abre un horizonte de posibilidades en el manejo de la fibra y su conjunción con otros medios de expresión que bien conoce o explora. Ensoñaciones del reposo se erige como un hito importante en su trayecto; punto de inflexión que consolida su andar y desandar hasta entonces en los predios de las artes visuales, al tiempo que marca nuevos derroteros en su producción.

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1 – Ensoñaciones del reposo (17.01.2025 – 17.02.2025) se expuso en el Centro Hispanoamericano de Cultura de La Habana como parte de los proyectos de artistas invitados a la XV edición de la Bienal de La Habana.

2 – Gaston Bachelard, La Terre et les rêveries du repos: essai sur les images de l´intimité (1946). Tr.: La tierra y las ensoñaciones del reposo: ensayo sobre las imágenes de la intimidad.

Etiquetas: Last modified: 25 abril, 2025