Mercado Secundario:
Se ciñe a obras que ya han sido vendidas al menos en una ocasión. Es el territorio de las Casas de Subastas. Es aquí donde se generan los grandes índices de especulación en una lucha descarnada por conseguir la venta del lote más elevado, Christie’s, Sotheby’s y Phillip’s son las tres grandes junto a la importantísima casa Durán en nuestro país.
Las casas de subastas son los actores del gran espectáculo del mercado del arte, donde la adrenalina que genera la puja lleva en muchas ocasiones a que se alcancen precios absolutamente alejados de la realidad. Se dan ocasiones en los que una misma pieza que ha alcanzado un alto precio, se vuelve a vender meses más tarde por un precio infinitamente menor, información que normalmente no llega hasta nuestros oídos.
Esta descarga de adrenalina llega a generar lo que se ha denominado Locura en Subasta: el comprador puja por encima de sus posibilidades económicas y luego no dispone de fondos para hacer frente al pago. En estos casos la pieza vuelve a salir a subasta y la diferencia del precio alcanzado con el que inicialmente se cerró, la paga “el loco”.
La Puja, es el método de participar en una subasta y puede darse en cuatro modalidades:
- Presencial (físicamente el comprador asiste a la venta)
- Por teléfono durante la venta (un agente sigue las instrucciones del comprador vía telefónica)
- Orden de Compra. Con anterioridad a la salida del lote se deja una orden de adquisición al comisario o encargado de la subasta.
- En Línea, en aquellas subastas que ofrecen una plataforma virtual. En 2012 se registró un tráfico de 2 millones y medio de usuarios en internet y es muy recomendable para la adquisición de grabado y fotografía.
Si alguien se decide a participar en una subasta las recomendaciones serían las siguientes:
- Fijarse un límite. Estoy interesado en este lote (cada una de las partes que componen un todo) y el precio máximo que estoy dispuesto a pagar es “X”.
- Solicitar un Informe de Condición (detalle del estado de conservación de la obra), obtener toda la información posible del artista y de la obra, adjudicaciones de obras similares, cotización del artista, e incluso la tasación de la pieza por un especialista independiente.
La cotización de una obra puede variar a la alta: en función de si pertenece a una colección prestigiosa o si ha sido exhibida en exposiciones de importancia, o a la baja: Si ha sido perjudicada en trabajos de restauración o si ha sido presentada con anterioridad en otras casas de subastas sin alcanzar una venta (obra quemada).
El precio final de la obra se compone de: Precio de adjudicación (precio de martillo o golpe de martillo) + Gastos de comisión de la casa (que suelen ir de un 10 a un 30%) + Impuestos.
Respecto a los precios de las obras de arte habría mucho que discutir pero nos centraremos en que de una manera básica, el sistema de oferta y demanda funciona a la perfección, cuanta mayor demanda mayor precio, existiendo en el mercado primario, incluso listas de espera para la adquisición de obra aun por realizar. Nuestra recomendación, si alguien está interesado en adquirir obra de un artista vivo, es esperar a una nueva producción del artista. A no ser que el interés esté centrado en una obra en particular.
Creditos: Banksy – Girl With Baloon – Sotheby’s – Jack Taylor/Getty Images
Etiquetas: I want to collect, Subastas Last modified: 27 noviembre, 2018