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Written by: #IWantToCollect Coleccionismo

I Want to Collect: Y tras la adquisición, ¿qué?

Parece que tras la adquisición de la obra, ya estamos listos para disfrutarla, contemplarla o compartirla con los amigos y aunque así es, muchas personas olvidan toda una serie de factores que hay que tener en cuenta.

Las obras de arte son como ya hemos visto “bienes muebles” susceptibles de deterioro y por lo tanto requieren de su aseguración y de su conservación.

Es recomendable dependiendo del los valores de nuestra colección, contratar un “seguro” para la misma que se encargará de hacer frente a un posible robo (indemnización pero también búsqueda de la obra) e imprevistos que puedan generar un deterioro de la obra, cubriendo por ejemplo su restauración. Existen distinto tipos de seguro por lo que siempre podemos recurrir a la ayuda de un consultor que nos oriente sobre cual es el seguro más adecuado para nuestra colección y nos ayude con los trámites y las famosas “letras pequeñas”.

Hay que reseñar también en la importancia de la conservación y el mantenimiento, para lo que también debemos dejarnos guiar por los especialistas que nos orientarán en diversos aspectos que van desde la colocación más idónea de la obra, atendiendo a parámetros de visibilidad y ubicación y la posibilidad de la incidencia de los factores ambientales sobre la misma hasta las acciones preventivas que debemos realizar.

Este tipo de acciones van a proporcionar que se garantice la preservación de las obras, su transmisión hacia el futuro y su valor.

Apuntes sobre la conservación I

“El primer sentimiento del hombre fue su existencia, el segundo el de su conservación” Rousseau.

A este respecto es muy importante introducir el concepto de “Conservación Preventiva” Siempre es más fácil y requiere un menor coste mantener que tratar de solventar un daño creado. Es también una manera de preservar y transmitir al futuro en lo relativo a legado pero también en su valor.

Es interesante la contratación de un seguro que cubra Daños/Hurto

Lo primero que hay que tener en cuenta son los “Factores Ambientales” que deben ser lo mas estables posibles. Minimizar los cambios de humedad y temperatura es determinante para su correcto mantenimiento.

Hay un par de conceptos básicos, aplicables a cualquier técnica y material, como son:
Evitar a toda costa la incidencia de la luz diurna directa. El calor y los rayos ultravioletas perjudican enormemente la estabilidad de los materiales.
Evitar su colocación cerca de fuentes de emisión de temperatura, calefactores o aires acondicionados.

A tener en cuenta:

  • Humedad Relativa del Aire: Higrógrafo (aparato de medición)
    Es la relación entre la Humedad Absoluta del Aire (cantidad de vapor de agua contenida en un metro cubico de aire) y la cantidad de saturación.
  • Temperatura: Grados Centígrados o Kelvin
  • Iluminancia (Lux): Flujo luminoso por unidad de superficie (Densidad de luz sobre una superficie dada)
    Luna Llena 0,2 Lux
    Dormitorio: 70-100 Lux
    Oficina: 500 Lux
    Dia: 32.000 a 100.00 Lux

Diferencia entre Luxómetro y Fotómetro:

La diferencia fundamental es que los luxómetros miden la luz incidente en un objeto y los fotómetros, la luz reflejada por un objeto.

En principio, ambos utilizan exactamente el mismo sistema, consistente en una célula sensible que mide el nivel de iluminancia que incide sobre ella. La unidad de medida normalizada para medir la luz es el “Lux”. Mientras que el luxómetro se limita a darnos una lectura en Lux, y nada más, el fotómetro va más allá y convierte esos Lux en valores concretos de apertura, velocidad y ASA

Etiquetas: Last modified: 25 diciembre, 2018